Bares nocturnos de Juan Madrid




Magistral novela negra ésta del malagueño Juan Madrid (1947). Es una novela que se "bebe" de un tirón, excelente por su dinamismo, sus diálogos, la frescura de los personajes y el ambiente que recrea a la perfección.

En los años 80, Madrid era un enjambre de bares nocturnos donde se follaba mucho. es la cultura de la movida madrileña, del destape y el sexo libre.

Treinta años más tarde, los bares nocturnos comienzan su fin. La novela gira nucleada en el cierre obligado de un bar de alterne, "Burbujas de oro", un bar que solo ha quedado para que de de comer a Juanita (madre de Silverio, cobrador de deudas y antiguo robador de hoteles) y a su amiga Catalina, dentro del sórdido ambiente de la noche actual de Madrid, donde se perdieron extinguidos los poetas, escitores e intelectuales de antaño para ser invadido por putas chinas ilegales.

La salvación de "Burbujas de oro" junto con la aparición de unos diamantes procedentes de Senegal y pertenecientes a un coronel asesino de aquél país, los cuales se plantean ser robados por Silverio y una monja española,Clara, que los necesita para una ONG la cual fue destruida por el sanguinario coronel, es una venganza y una causa justa.

Son dos historias que de pronto se interrelacionan. De forma fibrosa, musculosa, la prosa de Juan Madrid sirve para criticar (como en la película "el jardinero fiel") los desvíos de los fondos en paises subdesarrollados. Paralelamente, aparte de conocer los entresijos podridos de las ayudas a ONGs, se analizan las luchas tribales, los códigos de honor de los senegalese guerreros somas así como la cantidad de animales de dos patas que se encuentran en las cloacas del mundo nocturno de Madrid: especuladores, detectives de poca monta (Draper), es el mundo canallesco de la capital de España.

No obstante tras todo lo expuesto subyace una verdadera historia de amor. Helena y Silverio dibujan dentro de los Bares Nocturnos y su total oscuridad, dos llamitas que dan una pequeña luz a lo negro de la novela.

Lo dicho: magistral e de imprescindible lectura a los amantes de la novela negra. Juan Madrid es uno de sus mejores exponentes europeos.

;O))


Magistral novela negra ésta del malagueño Juan Madrid (1947). Es una novela que se "bebe" de un tirón, excelente por su dinamismo, sus diálogos, la frescura de los personajes y el ambiente que recrea a la perfección.

En los años 80, Madrid era un enjambre de bares nocturnos donde se follaba mucho. es la cultura de la movida madrileña, del destape y el sexo libre.

Treinta años más tarde, los bares nocturnos comienzan su fin. La novela gira nucleada en el cierre obligado de un bar de alterne, "Burbujas de oro", un bar que solo ha quedado para que de de comer a Juanita (madre de Silverio, cobrador de deudas y antiguo robador de hoteles) y a su amiga Catalina, dentro del sórdido ambiente de la noche actual de Madrid, donde se perdieron extinguidos los poetas, escitores e intelectuales de antaño para ser invadido por putas chinas ilegales.

La salvación de "Burbujas de oro" junto con la aparición de unos diamantes procedentes de Senegal y pertenecientes a un coronel asesino de aquél país, los cuales se plantean ser robados por Silverio y una monja española,Clara, que los necesita para una ONG la cual fue destruida por el sanguinario coronel, es una venganza y una causa justa.

Son dos historias que de pronto se interrelacionan. De forma fibrosa, musculosa, la prosa de Juan Madrid sirve para criticar (como en la película "el jardinero fiel") los desvíos de los fondos en paises subdesarrollados. Paralelamente, aparte de conocer los entresijos podridos de las ayudas a ONGs, se analizan las luchas tribales, los códigos de honor de los senegalese guerreros somas así como la cantidad de animales de dos patas que se encuentran en las cloacas del mundo nocturno de Madrid: especuladores, detectives de poca monta (Draper), es el mundo canallesco de la capital de España.

No obstante tras todo lo expuesto subyace una verdadera historia de amor. Helena y Silverio dibujan dentro de los Bares Nocturnos y su total oscuridad, dos llamitas que dan una pequeña luz a lo negro de la novela.

Lo dicho: magistral e de imprescindible lectura a los amantes de la novela negra. Juan Madrid es uno de sus mejores exponentes europeos.

;O))