HAY DOS FLORES NACIDAS DEL AMOR
Asomada al espejo de la Dama de la muerte, sentí temor. No era el miedo a lo desconocido lo que me aterraba, sino la angustia, del último suspiro. El lazo que me mantiene sujeta a este mundo, es demasiado fuerte, tanto, que alimenta mi voluntad. Hay dos flores nacidas del amor, que son parte de mi misma. Por mis dos rosas tomé la decisión de continuar en esta dimensión. La espiral de la metamorfosis hacia el otro lado, con sus invisibles dedos, tiraba de mi espíritu, pero la imagen de mis flores, fortalecía mi mente. Saliendo victoriosa en el careo con la Dama de la muerte, con el estandarte del amor maternal.
Escrito por Pili Ruiz el día 27 de Julio del 2011
^_________Pili_________^
HAY DOS FLORES NACIDAS DEL AMOR
Asomada al espejo de la Dama de la muerte, sentí temor. No era el miedo a lo desconocido lo que me aterraba, sino la angustia, del último suspiro. El lazo que me mantiene sujeta a este mundo, es demasiado fuerte, tanto, que alimenta mi voluntad. Hay dos flores nacidas del amor, que son parte de mi misma. Por mis dos rosas tomé la decisión de continuar en esta dimensión. La espiral de la metamorfosis hacia el otro lado, con sus invisibles dedos, tiraba de mi espíritu, pero la imagen de mis flores, fortalecía mi mente. Saliendo victoriosa en el careo con la Dama de la muerte, con el estandarte del amor maternal.
Escrito por Pili Ruiz el día 27 de Julio del 2011
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