Los confines



Manifiesto mi admiración por Trapiello, durante dos meses transportaba su "arca de las palabras" leyendo y aprendiendo de su trabajo, anotaba algunas de sus palabras para crear mi "miniarca de las palabras".

Me gusta de Trapiello su esmero en el trato de cada palabra, su técnica depurada para trasladarnos al terreno de la imaginación donde aumentamos nuestra creatividad y conocimiento, admiro de Andrés Trapiello su trabajo de investigación de "Las armas y las letras" donde el escritor toma conciencia de su propia postura ante el conflicto bélico que nos desunió. Admiro el Trapiello de "Los amantes del crimen perfecto", aunque he de manifestar que la novela que acabo de terminar "Los confines" no ha llegado a atraparme como esperaba.

La historia gravita alrededor de una relación de amor entre Max y Claudia (casados con Cathy y Agustín respectivamente) que nos sorprende al final del primer tercio de la obra con el descubrimiento de ser hermanos. El motor de la narración es el incesto, una historia de amor absoluto. Los confines es una historia (no tan infrecuente) de amor entre hermanos que se convierte en la fuerza motriz de la narración, es una novela que pretende ser radical y rompedora pero que no llega a cristalizar en el lector (al menos en mi) faltando como una sensación de necesidad, de la que carece completamente.

Una novela pues, no necesaria de escribir, tampoco necesaria de leer, aunque he de admitir que tampoco desdice la esmerada creación del maestro Trapiello. Se lee con interés.


Manifiesto mi admiración por Trapiello, durante dos meses transportaba su "arca de las palabras" leyendo y aprendiendo de su trabajo, anotaba algunas de sus palabras para crear mi "miniarca de las palabras".

Me gusta de Trapiello su esmero en el trato de cada palabra, su técnica depurada para trasladarnos al terreno de la imaginación donde aumentamos nuestra creatividad y conocimiento, admiro de Andrés Trapiello su trabajo de investigación de "Las armas y las letras" donde el escritor toma conciencia de su propia postura ante el conflicto bélico que nos desunió. Admiro el Trapiello de "Los amantes del crimen perfecto", aunque he de manifestar que la novela que acabo de terminar "Los confines" no ha llegado a atraparme como esperaba.

La historia gravita alrededor de una relación de amor entre Max y Claudia (casados con Cathy y Agustín respectivamente) que nos sorprende al final del primer tercio de la obra con el descubrimiento de ser hermanos. El motor de la narración es el incesto, una historia de amor absoluto. Los confines es una historia (no tan infrecuente) de amor entre hermanos que se convierte en la fuerza motriz de la narración, es una novela que pretende ser radical y rompedora pero que no llega a cristalizar en el lector (al menos en mi) faltando como una sensación de necesidad, de la que carece completamente.

Una novela pues, no necesaria de escribir, tampoco necesaria de leer, aunque he de admitir que tampoco desdice la esmerada creación del maestro Trapiello. Se lee con interés.